top of page

Al Robot: ¿Vivimos en la Matrix?


¿Vivimos en la Matrix?


¿Te has preguntado si alguien controla las decisiones que tomas día a día?


¿Eres realmente dueño de todas tus decisiones o alguien más decide por ti?


Al parecer las preguntas anteriores podrían tratarse de un curso para superación personal, sin embargo, me gustaría hacer una pausa y ponernos a reflexionar. En artículos anteriores hemos visto como “piensa una máquina” y como interactuamos con varias máquinas en nuestro día a día. También vimos que analizan nuestros sentimientos como ceros y unos (0,1).


¿Podría una máquina decidir por mí?


En un pequeño experimento que lleve a cabo con algunos amigos observe un patrón, que bien podría mostrarnos el comportamiento de cualquiera de nosotros si hacemos un análisis consciente del mismo. Acompáñame amable lector a ver las siguientes imágenes tomadas del buscador de internet Google uno de los más famosos actualmente, donde les pedía a 3 amigos buscar la palabra Israel:



Todos obtuvieron el mismo resultado usando el mismo navegador, es decir que el navegador decidió que información presentar a cada una de las personas sin importar cuál es su preferencia. ¿Cuántas veces pasas de la primera o segunda página de las búsquedas? Cuando el internet empezaba recuerdo que llegue a buscar hasta en 7 páginas diferentes para encontrar lo que estaba buscando, y hablo de las páginas que arrojan los resultados de la búsqueda no de los sitios que visito. Hoy en día la mayoría de las personas no pasamos de la primera página del buscador, inclusive me atrevería a decir que no pasamos de las primeras 4 sugerencias.


¿Esto quiere decir que una máquina, un algoritmo (ver el artículo Lenguaje Máquina del martes 21 de Julio) está decidiendo por nosotros? ¿Realmente es el buscador el que dice que debemos hacer? Las empresas pagan por un servicio de asignación de palabras, publicidad para ser el primero de la lista, pero porque estar dentro de las primeras opciones porque en cierto punto los usuarios de internet nos hemos vuelto un poco flojos dejando a un lado el análisis del contenido, escogiendo la primera opción más rápida. Hoy muchos programas o aplicaciones que se instalan en las computadoras, tabletas, celulares que simplemente damos siguiente, siguiente sin detenernos a leer, por lo que no sabemos a veces ni que tanto se instala provocando después dispositivos lentos. Cuando el internet inicio y existía otros buscadores famosos como Altavista, Yahoo, Netscape buscabas varias opciones, inclusive te movías a las siguientes 3 páginas para encontrar lo que realmente querías.


¿Quién tiene la culpa? ¿El algoritmo de búsqueda o nosotros? Creo que nos hemos vuelto cada vez más predecibles por lo tanto las empresas pagan varios miles o millones de pesos para ser los más populares de la cuadra porque saben que después de un par de opciones no seguimos bajando en el navegador, es más probable que volvamos a hacer la búsqueda utilizando más o menos palabras.


Pero veamos otro caso, ahora con el navegador de vídeos “Youtube” ya tan famoso. Acudimos todos los días para ver vídeos graciosos, noticias, películas, anuncios, etc. Aquí se le solicito a los mismos usuarios buscar la palabra Israel y estos fueron los resultados:

En esta ocasión se obtuvieron resultados diferentes para cada usuario como podemos observar en las imágenes donde sugirió viajes, noticias, busco personas. Esto quiere decir que el algoritmo de búsqueda está centrado más en las preferencias de cada persona. ¿Entonces aquí realmente estamos decidiendo nosotros?


Creo que en ambos casos decidimos cada uno de nosotros, sin embargo, en el segundo caso ocurre un fenómeno más interesante porque toda la vida nos está mostrando un universo de cosas que solo nos gustan a nosotros o personas que compartimos de alguna u otra forma las mismas preferencias.


Pero vayamos más allá, este fenómeno no sucede solo en Youtube, también ocurre en otras plataformas como Amazon que nos da sugerencias de acuerdo con lo que compramos con regularidad, o Netflix que nos sugiere con base al tipo de películas que hemos visto con anterioridad, igualmente Spotify que sugiere de acuerdo con nuestro último playlist. A veces el algoritmo falla y nos pone el último género que escuchamos, sin embargo, es lo que escuchamos, vemos, compramos con regularidad.


Esto hace que en varias ocasiones ya ni siquiera damos en la barra de búsqueda, y nos quedamos con lo que nos sugiere la aplicación. Todo esto nos deja viviendo siempre rodeado de lo que nos gusta a cada uno de nosotros, eso incluye noticias, establecimientos de compra entre otros. Pero quedemos aquí parados un momento, porque es aquí donde el fenómeno de burbuja o matrix está sucediendo, quedándonos siempre en un solo lugar y se nota que estamos tan permeados que no vemos más allá de nuestro propio mundo, que debo destacar lo hemos creado nosotros siguiendo las órdenes de un algoritmo que ejecuto una máquina con inteligencia artificial, alimentada de los datos del día a día de nuestros consumos.


Se presentan dos fenómenos importantes cuando tenemos nuestro único universo de información:


  • Nos volvemos extremos en lo que creemos sin términos medios.

  • Nos volvemos poco tolerantes con aquellos que piensan diferente a nosotros.


Se llegan a perder amistades por tener ideologías diferentes, por irle a un partido político u otro. Por irle al América o a las chivas, porque nos guste la música Pop o el Reggaetón o el Rock. ¿No se supone que vivimos en un mundo democrático? En un mundo con diversidad, donde podamos expresarnos y convivir todos.


Es aquí donde comienza a crearse la verdadera matrix o como le llaman por allí la burbuja de filtro (filter bubble del inglés.). Es un término utilizado por primera vez por el activista del internet Eli Pariser que lo define como un estado personal de aislamiento.


Si observamos con cuidado nos podremos dar cuenta que acotamos mucho al seleccionar nuestros propios intereses, perdiendo de vista la pintura completa y centrándonos en lo que nos agrada solo a nosotros.


Este fenómeno también viene acompañado de varios elementos de nuestra sociedad actual, así como esta corriente de pensamiento nacida a finales del siglo XIX tan conocida como el pensamiento positivo, que no te permite ver lo que está mal porque te hace daño. Hoy abundan este tipo de seminarios donde te recomiendan (casi ordenan) ya no veas noticias, películas de terror, guerra, no leas nada que ensucie tu mente con pensamientos negativos o pesimistas. Creo que el pensar de una u otra forma es parte de nuestra naturaleza y el investigar para aprender es algo que ya viene en la naturaleza del ser humano, curioso desde nacimiento.


Cuando realmente eso forma parte de nuestro entorno, si bien como todo sin excedernos, pero es parte de vivir en un mundo culturalmente diferente. Aun viviendo en un mismo país, entre estados tenemos diferente forma de pensamiento, actividades, comercios, etc.


Creo que al final los que tenemos el control seguimos siendo nosotros los humanos, quienes decidimos darle poder a las máquinas somos nosotros, la máquina no piensa en el estricto sentido como lo hacemos los humanos. Por lo tanto, es momento de sentarnos y hacer una reflexión, para poder romper con la matrix o burbuja que nosotros hemos creado en nuestro propio mundo.


Lo que quiero decir con todo esto es que la elección la estamos haciendo nosotros, nosotros decidimos si nos quedamos con la primera sugerencia o hacemos un análisis más extenso.

Recordando un poco a Cypher de la película matrix:


“Yo sé que este filete no existe. Sé que cuando me llevo a la boca… la Matrix le esta diciendo a mi cerebro que es jugoso y que esta delicioso. ¿Sabe de qué me doy cuenta?”


“La ignorancia es una dicha”



¿Cómo rompemos la burbuja?


Con la diversidad no sólo de género, sino de edades, de rural y urbano. Podemos debatir, sin menospreciar al contrincante o descalificarlo por sus argumentos. Darle pruebas y permitirle que muestre las suyas. Siendo tolerantes sin ser permisivos. Entablar diálogos llevando a las personas a comprender los puntos de vista sin obligarlos a salirse de un lugar u otro. Sin ofendernos por el primer comentario que recibimos, porque se habla de ser empáticos en ambos sentidos porque cada uno de nosotros traemos una educación diferente, vivencias y experiencias diferentes.


Tratar de ser un poco analíticos, buscar otras opciones a los navegadores actuales, a las herramientas de siempre. Si usamos Google, de vez en cuando utilizar yahoo o Duckduck go. En lugar de youtube, utilizar vimeo o daylimotion. Si utilizamos Android, de vez en cuando IOS o Windows Phone, en lugar de Netflix utilizar Amazon Prime Video.


Volvernos un poco más analíticos. No seguir solo un tipo de personas y opiniones en Twitter, también leer las noticias completas porque muchas veces estos medios solo muestran una parte y no la noticia completa.


No estallar sin haber escuchado todas las versiones, acudiendo a diversas fuentes, y siempre, siempre comprobar que sean fuentes fiables con noticias verdaderas.


La Matrix la creamos todos y cada uno de nosotros.



“¿Realmente la ignorancia es una dicha?”

Aviso Oportuno

1/13
WhatsApp Image 2024-05-15 at 1.09.41 PM.jpeg
organon_Mesa de trabajo 1.jpg
La Lealtad 243x400px.jpg
BANNERS INUNDACIONES_LA LEALTAD (1).jpg
bottom of page